
Reglas del Dojo
REGLAS DOJO OOKAMI WA REI RYU - OMOI REI KAI
1. Cada alumno debe contribuir a la creación de una atmósfera positiva, de armonía y respeto.
2. La limpieza constituye un acto de gratitud y respeto. Cada practicante debe participar en la limpieza del Dojo así como dedicarse a la purificación de su corazón y su mente.
3. La aceptación de un nuevo alumno dependerá de su afinidad con la filosofía y tradiciones de Niten Ichi Ryu y la Asociación cultural Wa Rei Ryu. Esto queda a discreción del Sensei.
4. El Dojo es un ámbito de respeto: al Fundador y su Enseñanza, al Sensei, al Dojo, a los compañeros y a los instrumentos de trabajo.
5. El conocimiento no se vende, se comparte. La cuota mensual cubre los gastos de alquiler del Dojo y los instrumentos de trabajo. Esta debe ser abonada la primera clase de cada mes.
REGLAS PARA EL PRACTICANTE
Es necesario respetar la enseñanza, la filosofía del Fundador y la manera en que el Sensei la transmite.
Cada practicante se compromete a no utilizar jamás una técnica de Kenjutsu - Batto para hacer daño a otros o para exteriorizar su ego. El Kenjutsu no es una técnica de destrucción sino de creación, una herramienta que conduce al desarrollo de una sociedad mejor a través del desarrollo del carácter del individuo.
Está prohibido solventar conflictos personales sobre el tatami. El Kenjutsu no es una pelea callejera. Están en el tatami para trascender y purificar sus reacciones agresivas, para adoptar el espíritu de un Samurái a través del descubrimiento de la propia responsabilidad social.
No debe haber espíritu de competición sobre el tatami. El objetivo del Kenjutsu no es pelear y derrotar al enemigo sino pelear y derrotar a los propios instintos agresivos. La fuerza de la esgrima Japonesa no reside en la potencia muscular sino en la flexibilidad, la comunicación, el control de uno mismo y la modestia.
No se tolerará ninguna clase de insolencia. Las opiniones o consultas deben realizarse de manera correcta y respetuosa.
Cada alumno tiene distintas capacidades físicas y diferentes razones para practicar el Budo. Todas merecen respeto. El verdadero Budo es la aplicación correcta y flexible de la técnica apropiada en cualquier circunstancia que se presente. Es su responsabilidad no ocasionar daño alguno. Ha de protegerse al compañero y a uno mismo.
Todos los practicantes estudian los mismos principios. No debe haber desacuerdos en el seno del grupo. Todos los habitantes del Dojo forman una gran familia. El secreto del Budo es la armonía.
ETIQUETA SOBRE EL TATAMI
Se debe saludar al entrar y al salir del tatami.
El saludo siempre es en dirección del Kamiza y el retrato del fundador.
Respetar los instrumentos de trabajo. El Kimono y el Hakama (atuendo de entrenamiento) deben conservarse limpios y en buen estado, solo se permitirá el Mon de la escuela sobre el atuendo de entrenamiento. De no tener el nivel de práctica para usar Kimono y Hakama se deberá usar ropa cómoda pero en buen estado que no tenga identificación alguna con alguna organización política, religión o de otro tipo como deportiva. Las armas deben estar en perfecto estado y limpias.
No utilizar vestimentas o armas que no le pertenezcan.
La clase empieza y termina con una ceremonia. Es esencial la puntualidad para participar en ella, pero si es inevitable la demora, debe esperar sentados al lado del tatami hasta que el Sensei le haga la señal para incorporarse a la clase.
La forma correcta de sentarse sobre el tatami es la posición seiza (arrodillado). En el caso de tener una lesión en la rodilla, puede sentarse en loto (piernas cruzadas). Nunca se debe estirar las piernas ni se apoyarse contra la pared o una columna. Un samurái debe estar presto a reaccionar en todo momento.
No salga del tatami durante el entrenamiento, salvo en caso de lesión o malestar.
Cuando el Sensei demuestra una técnica, debe permanecer sentados en seiza y observar con atención. Después de la demostración, saludar al maestro, a continuación a un compañero y luego comenzar a trabajar.
En el momento que se anuncia el fin de una técnica, saludar a su compañero y reunirse con los demás practicantes en línea.
No permanezca de pie, sin trabajar, sobre el tatami. Si es necesario, espera tu turno sentados en seiza.
Si le es necesario formular una pregunta al Sensei, debe acercarse a él - nunca llamarlo en voz alta desde lejos -. Se debe saludar con respeto y esperar a que esté disponible (Un saludo de pie es suficiente en este caso).
Cuando el Sensei corrija a algún practicante, puede parar su práctica y mirar. Sentarse en seiza y saludar de la misma manera.
Respetar a los practicantes de mayor graduación y antigüedad. No discuta nunca a propósito de las técnicas.
Si conoce el movimiento y trabaja con alguien que lo desconoce, puede guiarlo. Pero no intente corregir a su compañero. Si lo cree necesario, consulte al Sensei para que él lo haga.
Hable lo menos posible. El Budo es experiencia.
No permanezca ocioso sobre el tatami antes o después de la clase. El espacio está reservado para estudiantes que desean trabajar.
Es responsabilidad de todos mantener el Dojo limpio.
No se debe comer, beber, fumar o mascar chicle dentro y fuera del tatami sin autorización.
No es aconsejable llevar joyas durante el entrenamiento.
NORMAS SOBRE EL MANEJO Y CUIDADO DEL SABLE
El sable es considerado el alma del guerrero samurái, por lo que su posesión y uso debe observar las siguientes normas:
1. No debe desenvainarse un sable en presencia de otro sin pedir permiso. La exhibición de una hoja de sable desenvainada es considerada una injuria, a menos que sea entre conocedores o expertos de sable, en cuyo caso deberán seguirse las normas de etiqueta para desenvainar los sables. No se puede tocar el sable de otro sin su permiso y jamás bajo ningún concepto tocar la hoja ni acercársela a la cara. El respeto riguroso de la etiqueta es un elemento importante de la práctica del Budo.
2. Jamás dejar el arma desatendida o de mala manera, por ejemplo lanzándola al suelo o al tatami, ni en los vestuarios, ni en ningún otro lugar. Se ha de buscar un lugar resguardado y de una forma cuidadosa, dado que es un objeto valioso, con un valor espiritual noble.
3. Al terminar de utilizarlo, si procede a su limpieza en el Dojo, siempre debe ser de forma discreta y en un lugar apartado en el tatami. Se ha de escoger un lugar en el cual nadie lo pueda pisar, ni pasar por encima, ni dejarlo de pie apoyado en la pared sino cuidadosamente colocado longitudinalmente en el tatami, donde pueda ser encontrado y recogido con facilidad y rapidez y nunca con el filo hacia fuera.
4. Si no se está realizando un kata o un kumitachi, y el sensei no lo pide, el sable debe estar siempre en la cintura, envainado. En caso del bokken se debe portar a la altura de la cintura tomado con la mano izquierda.
5. Se debe siempre y sin excepción tratar con respeto y con sumo cuidado el sable, no solo por seguridad del mismo practicante y de sus compañeros, sino porque faltar el respeto o ser descuidado con el arma va en contra de la filosofía del Dojo y de estas Artes Marciales, es ofender al propio espíritu, al de los demás y al del Recinto.
NORMAS PARA OBSERVADORES INVITADOS
Cualquier persona puede observar una clase en cualquier momento, a condición de que sean respetadas las reglas siguientes:
1. Ocupe su lugar con respeto, no apoye las piernas encima de un mueble ni adopte una actitud irrespetuosa.
2. No comer o beber durante la clase.
3. No hable con nadie que se encuentre en el tatami.
4. No debe pasearse mientras el profesor demuestra o corrige un movimiento.
5. Al principio y al final de las clases debe sentarse en seiza y saludar junto a los demás. Permanecer sentados hasta que el Sensei haya empezado el entrenamiento o dejado el tatami al final de la clase.
Cualquier duda que surja y no esté contemplada aquí, puede consultarse al Sensei de la manera antes mencionada.