
Nuestra Filosofía
義 Gi - Justicia o Rectitud (decisiones correctas)
El samurai es honrado en sus tratos con todo el mundo. Cree en la justicia, pero no en la que de los demás, sino en la que emana de su corazón. Para un auténtico samurái no existen las tonalidades de gris en lo que se refiere a honradez y justicia; solo existe lo correcto y lo incorrecto.
勇 Yu - Coraje
El samurái se alza sobre las masas de gente que teme actuar. Ocultarse como una tortuga se oculta en su caparazón no es vivir. Un samurái debe tener valor heroico aceptando los riesgos que implica ser fiel a los propios principios. Esto le lleva a vivir la vida de forma plena, completa, maravillosa. El coraje heroico no es ciego, es inteligente y fuerte: reemplaza el miedo visceral por el respeto y la precaución racionales.
仁 Jin - Compasión
Mediante el entrenamiento intenso y la meditación el samurái se vuelve rápido, fuerte y sabio. Desarrolla un poder que le diferencia de los demás pero que usará por el bien de todos. Siente compasión hacia sus semejantes y ayuda a sus compañeros en cualquier oportunidad. Si la ocasión no surge, el samurái sale a buscarla.
礼 Rei - Respeto, cortesía
Un samurái no tienen motivos para ser cruel ni necesita demostrar su fuerza. Es respetuoso con sus enemigos porque sin esta muestra directa de respeto, se estaría comportando como un animal. Un samurái recibe respeto no solo por su fiereza en la batalla, sino también por su manera de tratar a los demás. La auténtica fuerza interior del samurái se vuelve evidente en tiempos difíciles.
誠 Makoto - Honestidad, sinceridad absoluta
Cuando un samurái dice que hará algo, es como si ya estuviera hecho. Nada en esta tierra lo detendrá en la realización de lo que ha dicho que hará. No ha de «dar su palabra», no necesita prometer ni amenazar, porque el simple hecho de hablar forma parte de la acción. Hablar y hacer son la misma cosa.
名誉「名譽」Meiyo - Honor
Es la virtud más importante de todas. El auténtico samurái sólo tiene un juez de su propio honor, y es él mismo. Las decisiones que toma y cómo las lleva a cabo son un reflejo de quién es en realidad. No puede ocultarse de sí mismo. En este sentido, el samurái es existencialista, porque para él no existe ninguna entidad humana o divina en la que poder descargar culpa o vergüenza. En caso de quedar mancillado su honor a sus propios ojos, la única forma de restaurarlo es mediante el Seppuku o suicidio ritual.
忠義 Chugi - Lealtad
Haber hecho o dicho algo, significa que ese algo le pertenece. Es responsable de ello y de todas las consecuencias que ello se deriven. Un samurái es intensamente leal a aquellos bajo su cuidado y permanece siempre fiel a aquellos de los que es responsable. Para el samurái, las palabras de un hombre son como sus huellas: puedes seguirlas donde quiera que vaya.
"A la fuerza desmedida se la vence con técnica.
"No tengo parientes, yo hago que la Tierra y el Cielo lo sean.
No tengo hogar, yo hago que el Tan T'ien lo sea.
No tengo poder divino, yo hago de la honestidad mi poder divino.
No tengo miedos, yo hago mis medios de la docilidad.
No tengo poder mágico, yo hago de mi personalidad mi poder mágico.
No tengo cuerpo, yo hago del estoicismo mi cuerpo.
No tengo ojos, yo hago del relámpago mis ojos.
No tengo oídos, yo hago de mi sensibilidad mis oídos.
No tengo extremidades, yo hago de la rapidez mis extremidades.
No tengo leyes, yo hago de mi autodefensa mis leyes.
No tengo estrategia, yo hago de lo correcto para matar y de lo correcto para restituir la vida mi estrategia.
No tengo ideas, yo hago de tomar la oportunidad de antemano mis ideas.
No tengo milagros, yo hago de las leyes correctas mis milagros.
No tengo principios, yo hago de la adaptabilidad a todas las circunstancias mis principios.
No tengo tácticas, yo hago del vacío y la plenitud mis tácticas.
No tengo talento, yo hago que mi astucia sea mi talento.
No tengo amigos, yo hago de mi mente mi amiga.
No tengo enemigos, yo hago del descuido mi enemigo.
No tengo armadura, yo hago de la benevolencia mi armadura.
No tengo castillo, yo hago de mi mente inamovible mi castillo.
No tengo espada, yo hago de mi no-mente mi espada.
Aceptamos el dolor, controlamos el miedo y dominamos el ego"